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¿Qué hacer en la CDMX durante las vacaciones?

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Si tienes tiempo libre y no saldrás de la CDMX en estas vacaciones, a continuación te dejamos algunas recomendaciones que seguro te encantarán.

Pabellón coreano

El Bosque de Chapultepec es tan grande que tiene varios secretos guardados. Uno de ellos es el Pabellón coreano, que está dentro del jardín de los Adultos Mayores, entre Paseo de la Reforma y calzada Chivatito, dos de las avenidas más transitadas y ruidosas.

Seguramente estos días estará más tranquilo que nunca. Para entrar, si no eres un adulto de la tercera edad, es necesario presentar una identificación oficial en la coordinación del jardín y no puedes estar dentro del Pabellón más de media hora.

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Casa de Francia en México

Forma parte del Instituto Francés de América Latina y es parte de Chilangolandia desde hace casi 20 años. La casa donde está es de principios del siglo XIX y resalta porque en la zona cada vez hay más construcciones contemporáneas… este contraste es una parada obligada si estás buscando qué hacer en vacaciones en CDMX.

La mediateca y la arquitectura del edificio son las principales razones para que te decidas a visitarla. La mediateca es de dos pisos y tiene material de distintas áreas, como arte, literatura e historia. También hay cómics y cuentos, además de películas, discos y programas de televisión.

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Monumento a la Revolución

¿Sabías que el Monumento a la Revolución tiene un mirador? En el sótano hay un museo sobre la historia de México desde 1867, además de criptas de personajes importantes. En el centenario de la Revolución se remodeló la plaza de la República —donde se encuentra esta construcción— y, desde entonces, se puede subir al mirador por un elevador panorámico.

Para entrar, hay dos tipos de boletos: el ilimitado cuesta $80 y te da acceso a la linternilla, al mirador, a las galerías y al paseo cimentación; para los menores de 13 años, estudiantes, profesores o personas con credencial del Inapam cuesta $60. El boleto limitado cuesta $50 y con él solo puedes subir al mirador y utilizar los telescopios.

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Cárcamo de Dolores

Es otro secreto del Bosque de Chapultepec. Ni te vas a sentir en la ciudad, pues es sumamente tranquilo e ideal para quienes buscan paz en sus opciones de qué hacer en vacaciones en CDMX. Para entrar, compra tu boleto ahí mismo o en el Museo de Historia Natural, cuesta $26.

El Cárcamo de Dolores es un homenaje a las personas que construyeron el sistema Lerma —que abastece de agua potable a CDMX—. Dentro está el mural El agua, el origen de la vida y una escultura bicéfala de Tláloc, ambos son de Diego Rivera. Originalmente, el mural debía estar sumergido en el agua, pero con el paso del tiempo se dañó, por lo que el líquido tuvo que ser retirado.

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Museo del chocolate

Amantes del cacao: ¿ya conocen este museo dedicado al chocolate? Aquí encuentran cómo ha evolucionado el chocolate con el paso del tiempo. Hay piezas nacionales y extranjeras (cuyos orígenes datan del siglo XVII hasta la actualidad), anuncios publicitarios y maquetas.

Se encuentra en una casa construida 1909 y, en ocasiones, hay cursos y talleres. La entrada general cuesta $70 o $45 si eres menor de 12 años, estudiante, maestro o persona con credencial del Inapam.

Horario: lunes a doming 11-17 h

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Estudios Churubusco

Desde el pasado 6 de diciembre y hasta el 1 de abril se muestra la exposición “La fábrica de cine: Estudios Churubusco, 1945-2017”, en la que puedes ver cámaras cinematográficas, así como accesorios de distintas películas mexicanas. ¿Qué tal tomarte una selfie frente al coche que chocó en Atlixco y Juan Escutia, en Amores Perros? También hay vestuario de Pedro Armendáriz, la silla del Indio Fernández y cosas de Cronos.

Parque Masayoshi Ohira

Fue inaugurado en 1942; sin embargo, estuvo muchos años en el olvido hasta que fue remodelado en 2015 cuando, al fin, se le nombró parque Masayoshi Ohira, en honor al Primer Ministro de Japón que visitó nuestro país en 1980. Antes de eso, los vecinos lo llamaban “Parque La Pagoda”. Tiene un pequeño lago y puentes de estilo oriental, además de cerezos y pinos.

 

Fuente: Chilango

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