Como cuando alguien te envía granadas por paquetería. Sí, este suceso que parece sacado de un capítulo de los Simpsons ocurrió en la Ciudad de México. Una empresa de paquetería interceptó 996 granadas que fueron enviadas desde Tamaulipas.
El cargamento no estaba oculto ni camuflado, únicamente fue empacado en 40 cajas y llevado a una oficina de envíos, incluso ya estaba a punto de ser mandado a su destinatario, pero justo cuando las granadas ya estaban en ruta, gracias a una inspección policiaca se descubrió el contenido.
Los perros de la Unidad Canina alertaron a elementos de la policía sobre las cajas que, a simple vista, parecían inofensivas; al abrirlas descubrieron que se trataba de casi mil granadas de fragmentación que habían sido enviadas desde Tamaulipas con destino a un domicilio en la colonia Santa María Ticomán, de la delegación Gustavo A. Madero.
La Comisión Nacional de Seguridad emitió un comunicado en el que aclaró que las granadas no contenían material explosivo, por lo que no representaban riesgo para la población. La Secretaría de Seguridad Pública resguarda los artefactos y ya se iniciaron las investigaciones correspondientes para deslindar responsabilidades.