Manuel González Flores, secretario general de Gobierno del estado, informó que el disturbio de la noche del miércoles en el penal de Topo Chico no fue una riña sino un asesinato, y se originó porque un líder del cártel de Los Zetas dejó de entregar dinero a sus superiores y éstos ordenaron su muerte.
El funcionario estatal dijo que el saldo final del enfrentamiento fue de 3 personas muertas y 19 heridas, de las cuales 5 no fueron de gravedad y ya fueron dadas de alta.
González Flores señaló que el líder sentenciado era Javier Orlando Galindo Puentes, alias El Maruchan, quien era el brazo derecho de Juan Pedro Saldívar Farías, alias El Z-27, uno de los protagonistas de la riña del 11 de febrero que dejó 49 personas muertas.
Galindo Puentes fue encontrado con heridas de objetos contundentes y armas blancas; aunque se le dieron los primeros auxilios no sobrevivió, al igual que Edelmiro Guadalupe Gaspar Rubio y Jesús Ledezma Ramírez.
Por su parte, el secretario de Seguridad Pública del estado, General Cuauhtémoc Antúnez Pérez, dijo que Galindo Puentes, conocido también como Jesús Galindo Puente o Francisco Javier Puente Macías se dirigía a su dormitorio después de las 22:00 cuando fue atacado por un grupo de entre seis y siete reos.
Luego de recibir el reporte de la pelea, 25 elementos de la Fuerza Civil ingresaron al penal del Topo Chico y con ayuda de gas lacrimógeno y armas no letales tipo gotcha lograron controlar la situación.
Al respecto, el procurador de Justicia, Roberto Flores, dijo que se han obtenido 20 entrevistas de los reos y ya cuentan con pistas de los internos que iniciaron la riña.