Las uñas postizas se han ido convirtiendo, poco a poco, en uno de los accesorios que cada vez más mujeres utilizan, y es que gracias a ellas, las manos femeninas pueden verse lindas, elegantes y cuidadas a la vez.
Sin embargo, muchas veces las mujeres comenzamos a utilizar cosas que “se ven bonitas” sin antes reparar en las posibles consecuencias que pueden tener para nuestra salud, y desafortunadamente, este es el caso de este tipo de aplicaciones en las uñas, sobre todo si se está acostumbrada a utilizarlas con gran frecuencia, pues la salud de las uñas naturales puede dañarse de manera impresionante debido al proceso de colocación y los adhesivos que se usan.
Especialistas advierten que el primer y más recurrente riesgo de las uñas postizas es la aparición de hongos, la cual se origina por la humedad; por ello cuando te apliques uñas acrílicas o sintéticas debes verificar que queden bien adheridas a tu uña natural, de esta forma no habrá espacio para que se acumule la humedad y se produzcan hongos.
“El cuidado y limpieza de las uñas, más que un asunto de estética, evita que sean transportadoras de hongos o bacterias que desencadenen alguna enfermedad”, afirmó la dermatóloga Alejandra Iglesias López.
Por otro lado, se ha mencionado que el segundo problema que las uñas postizas provocan son las alergias, pues algunas personas reaccionan hacia diversos barnices, acetonas y pegamentos que irritan la piel o provocan otro tipo de reacciones; si esto ocurre es recomendable que se suspenda la aplicación y visitar al médico.
Finalmente, y no por eso menos importante, se encuentra el hecho del desgaste de las uñas naturales, pues para colocar las postizas se deben incluso limar, generando el gran adelgazamiento de las capas naturales de las uñas y por consiguiente, las grandes probabilidades de que se doblen, creando así dolor y hasta heridas importantes.