Todos conocemos la importancia de practicar deporte para mantener nuestro cuerpo y nuestra mente en plena forma. Hacer ejercicio mejora las funciones de nuestro organismo, nos activa y, además, genera endorfinas, la hormona de la felicidad. Pero para lograrlo, hay que hacerlo bien. ¿Cómo? Evitando malas prácticas que pueden resultar perjudiciales, tanto a corto como a largo plazo, y tomando las precauciones adecuadas en todo momento.
Así que antes de enfundarte tu outfit deportivo y poner en tu lista de reproducción alguna de estas canciones para motivarte, ¡sigue nuestros consejos!
Lo primero y más importante es tener conciencia de nuestras capacidades y limitaciones físicas. ¿Estamos en buena forma? ¿Realizamos ejercicio de forma habitual? En función de las respuestas, se pueden agrupar los deportistas en tres grandes grupos. Primero, los que nunca practican ejercicio o lo hacen de forma muy esporádica. Segundo, aquellos que hacen deporte de forma regular y tienen un hábito establecido. Y tercero, los profesionales del deporte o aquellas personas que lo practican a alto nivel.
Existen tres grandes grupos de lesiones: las que se producen por exceso de ejercicio, las que se producen por falta de éste y las lesiones agudas.
• Las lesiones por exceso de uso: son comunes en deportistas que realizan ejercicio de forma periódica o habitual. “Se producen por sobrepasar la capacidad de resistencia que tiene nuestro organismo”, afirma Amilibia. Algunos ejemplos son las lesiones musculares, las lesiones ligamentosas o la tendinitis.
• Las lesiones por falta de uso: son más habituales en aquellas personas que no realizan nunca ejercicio y, en el momento de hacerlo, su cuerpo no está preparado para ello. El tipo de lesión más común en estos casos son las conocidas agujetas. Se producen por una microlesión del músculo cuando se le somete a un esfuerzo excesivo.
• Las lesiones agudas: a diferencia de las anteriores, tienen un factor de imprevisibilidad más alto. Malos gestos, caídas, torceduras o traumatismos son algunos ejemplos de este tipo de lesiones.
10 claves para prevenir lesiones en el deporte
Consejos para prevenir lesiones
1. Iniciar la práctica de deporte de forma gradual. “Es importante darle tiempo al músculo para que aumente su capacidad de resistencia y su potencia mediante la aparición de más células musculares y el aumento de resistencia de las mismas”. Si nunca hemos practicado deporte de forma regular, no debemos pasar de 0 a 100 en pocos días. Se aconseja acostumbrar a nuestro cuerpo de forma paulatina.
2. Calentar antes de empezar la actividad física. “Un calentamiento previo es imprescindible. Nos va a generar un mayor flujo de sangre y, en consecuencia, va a oxigenar nuestros músculos y los va a preparar para el esfuerzo”.
3. Recuperarnos después del esfuerzo. “No debemos parar bruscamente. Es importante dejar enfriar nuestro cuerpo de forma gradual, disminuyendo el ritmo paulatinamente hasta parar”. Unos 5 o 10 minutos de deceleración serán suficientes.
4. Realizar estiramientos antes y después del ejercicio. Es importante estirar bien los músculos que van a usarse durante la actividad para darles más elasticidad. Al mismo tiempo, ayuda a recuperar la circulación sanguínea normal de la zona una vez hemos finalizado. “Las zonas del cuerpo que precisan más el estiramiento son los muslos, las pantorrillas, la espalda y los hombros”.
5. Hidratarnos en todo momento. Evitar la deshidratación es vital para la salud de nuestro organismo. En caso contrario, podemos favorecer los golpes de calor y nuestro cuerpo no puede funcionar correctamente.
6. La técnica es fundamental. “Una mala técnica es fuente de lesiones”. Por ello, es importante que al iniciar un ejercicio nuevo pidamos ayuda a un profesional del deporte que nos indique cuál es la mejor posición y forma de ejecutar la actividad para evitar futuras lesiones.
7. Descansar bien. Nuestro organismo necesita estar en plenas condiciones para poder sacar el máximo provecho al ejercicio. Si estamos cansados, nuestro organismo no va a responder igual y la probabilidad de sufrir lesiones aumentará.
8. Comer adecuadamente. Igual que con el descanso, la alimentación es fundamental. Si no hemos comido bien o suficiente, podemos sufrir mareos o desmayos. Es vital introducir carbohidratos en nuestra dieta si queremos rendir de forma adecuada durante el ejercicio.
9. Prestar atención al equipo. Si realizamos un ejercicio que precisa de máquinas u otras herramientas, debemos asegurarnos que éstas están en su mejor estado. Además, es importante mirar si la posición de la máquina es adecuada para nuestra altura y nuestro cuerpo para garantizar nuestra seguridad en todo momento.
10. Indumentaria. Tanto la ropa como las zapatillas son muy importantes para ayudar a prevenir lesiones. Debemos usar calzado y prendas de vestir adecuadas a nuestra actividad y proteger las partes óptimas de nuestro cuerpo. Por ejemplo, si salimos a correr necesitaremos unas zapatillas con unas características diferentes a las que necesitaremos para ir a una clase de spinning o de fitness.
“Es importante tener en cuenta estos pequeños detalles para poder practicar deporte de forma divertida, fácil, eficiente y, sobre todo, segura”, aconseja el traumatólogo. Con estos 10 consejos para evitar lesiones y un poquito de motivación extra, seguro que tienes la energía suficiente para comerte el mundo. ¡Adelante!